El fin de semana ha dejado un sabor agridulce. Tanto el primer equipo, que milita en División de Honor Plata, como el filial, recién debutante en Primera Nacional, se han estrenado en la competición con derrotas. Sin embargo, en ambos casos hubo fases de juego muy prometedoras que invitan al optimismo de cara al futuro inmediato.
División de Honor Plata: Puerto Sagunto 28 – 24 BM Proin Sevilla
El BM Proin Sevilla cayó en su visita al Fertiberia Puerto Sagunto (28-24) en la primera jornada liguera. El encuentro, disputado en el Pabellón Port de Sagunt, estuvo marcado por la igualdad durante gran parte de los 60 minutos.
En la primera mitad, los hombres de Víctor Montesinos ofrecieron una defensa sólida y un ataque ordenado, llegando al descanso con solo un gol de desventaja (12-11). La efectividad de los valencianos desde los siete metros fue determinante: Jakob Pelko firmó un impecable 6/6 en lanzamientos.
Por parte sevillana, el más destacado fue Sasha Tioumentsev, con siete goles, siendo el referente ofensivo de su equipo. En el minuto 54, BM Proin Sevilla estaba a solo un tanto de empatar, pero varias pérdidas en los instantes finales resultaron letales. Puerto Sagunto aprovechó esos errores para sentenciar con un marcador más amplio de lo que reflejó el desarrollo del partido.
Tras este debut, el conjunto hispalense ya piensa en la segunda jornada: el próximo jueves a las 19:30 en El Paraguas, donde recibirá al Colegio Los Sauces, en lo que será la primera oportunidad para brindar una victoria a su afición.
Primera Nacional: PAN Moguer 33 – 24 BM Proin Sevilla
El fin de semana también ha significado el estreno del segundo equipo del club, que ha visitado al PAN Moguer en su debut en Primera Nacional. El partido comenzó con intensidad: Andrés Centeno Fernández abrió el marcador desde el lateral derecho, dando ventaja inicial a los sevillanos.
La reacción onubense no tardó en llegar. Liderados por Carlos González Villegas, autor de 8 goles y clave en defensa, Moguer fue imponiendo su ritmo gracias a rápidas transiciones y eficacia desde los siete metros. Al descanso se llegó con 14-10 para los locales.
En la segunda parte, la brecha se fue ampliando progresivamente hasta el definitivo 33-24. La solidez defensiva y el empuje ofensivo de Moguer marcaron la diferencia en un encuentro que sirvió de aprendizaje para los hispalenses, que buscan asentarse en la categoría y crecer con el paso de las jornadas.
