El equipo sufrió una derrota ajustada este fin de semana al caer por 20-23 frente a Trops Málaga en un encuentro cargado de intensidad y equilibrio. Durante buena parte del partido, la igualdad fue la tónica dominante, dejando a la afición en vilo hasta los últimos compases del encuentro. A pesar del esfuerzo y la entrega mostrada, varios factores clave terminaron inclinando la balanza a favor del conjunto malagueño.
Desde el inicio, ambos equipos se mantuvieron en una constante pugna por el control del juego. El intercambio de goles y la solidez defensiva por parte de ambos lados hicieron que el marcador avanzara lentamente. Trops Málaga, impuso el ritmo al principio del partido, sin embargo, el equipo sevillano consiguió empatar yéndose al descanso con igualdad en el marcador.
Una vez trascurrida la segunda mitad, la efectividad en el tiro fue un problema recurrente que terminó pasando factura.
El partido se mantuvo igualado hasta el minuto 55. Fue entonces cuando la falta de precisión y la mala fortuna aparecieron como protagonistas. Hasta siete disparos acabaron estrellándose contra los palos, una cifra que refleja la frustración del equipo en los momentos decisivos. Estas imprecisiones se tradujeron en contragolpes letales por parte de Trops Málaga, que supo capitalizar cada oportunidad para distanciarse en los últimos minutos y asegurar su victoria.
El próximo partido se disputará el domingo 1 de diciembre contra Dólmenes Antequera, último clasificado de la tabla con solo 3 puntos. Una oportunidad clave para sumar y recuperar sensaciones.